Sí a María
Somos Esther y Miguel, y nuestras hijas Mónica y Esther. Nuestra historia no comienza con un proyecto ni con un plan, sino con una llamada. Una llamada sencilla y profunda: decir “sí” a María.
A lo largo de los años, hemos descubierto que cuando se abre el corazón a la Virgen, ella toma de la mano y conduce con ternura al Corazón de Jesús. Lo que empezó como una experiencia familiar se fue transformando en un camino compartido con muchas personas que, movidas por la fe, se unieron en oración y en peregrinación.
Creemos firmemente que es Dios vivo quien escribe esta historia. María ha sido el medio, la Madre que reúne, que acompaña y que lleva a su Hijo.
Sí a María nace de esta experiencia: de un “fiat” ofrecido en lo pequeño, de ver cómo la gracia actúa en lo cotidiano y de caminar con otros que también han sentido esa misma llamada en el corazón.
Nuestra familia desea seguir respondiendo con fe, confiando en que cada paso dado con María nos acerca más a Jesús.

